sábado, 19 de marzo de 2011

2ª Parte: Capítulo 2: El pasado ¿Pisado?

El Cidec prometía ser un colegio diferente, con optativos en vez de recreos, consistían en que, en vez de hacer lo que querés fuera de la hora de clases tenes que realizar actividades que pueden ser: jugar ajedrez, o hacer plástica, o escribir, o dibujar, o salir al patio, ese tipo de cosas…
Además prometía ser un colegio lleno de personas bondadosas que a uno lo quieren, lo cuidan, lo protegen, lo consuelan y lo alientan a que estudiar no sea una obligación sino algo propio de nosotros para que lo hagamos con gusto.
¡¡JAJAJA, POR FAVOR!!
Te prometían el cielo y fue el infierno en persona.
La escuela a la que le atribuyo la mayor cantidad de culpa sobre mi situación actual, mucho rencor, mucho odio, mucha tristeza, mucho gris recuerdo de ese lugar horrible.

1) Un par de compañeras del Cuarahí también fueron al cidec, y se encargaron de establecer en el, la reputación que Lucy.F y yo habíamos tenido, o sea NO PUDIMOS empezar de nuevo, nos cambiamos de escuela, pero era como seguir en la anterior, en realidad era peor.
Toda la clase (menos una persona, Lorena, que se hizo nuestra “amiga”) a mi y a Lucy.F nos pusieron apodos insultantes, a ella le decía “feto” y a mi “defo”, así que éramos “feto y defo” (porque tampoco nos trataban como seres independientes, siempre éramos juntas.) y nos molestaban y nos excluían y nos miraban mal y nos censuraban y nos excluían de nuevo.
Y cuando casi todos los días iban y le preguntaban a Lore (adelante de nosotras) “¿Porqué sos amiga de Feto y Defo?”, ella no decía, porque me caen bien o porque son buena gente, ella decía “no se” y se avergonzaba…
Todo bien Lore, no pasa nada.
Recuerdo que en un recreo, estabamos con Lucy y Lore jugando afuera y vienen unas compañeras de nuestra clase, se acerca a mi Carla y me dice sonriente “Tapate la boca!”, yo pensando que se trataba de un juego le hice caso, “Mmmm… Ahora tapate la nariz” La mire extrañada pero continué obedeciendo, al hacerlo ella contesta “Así estas mucho mejor!” y se va, igual de sonriente a como había llegado acompañada de las risotadas de sus amigas, ¿Yo? Yo hice de cuenta que no había pasado nada, me moría de la vergüenza frente a Lucy y Lore, pero no quería demostrarlo. En mi casa a solas y entre llantos fue otra cosa.

2) Los Maestros eran un desastre, me acuerdo de Mercedes (Meche), nos pidió la cuadernola de su clase para corregirla, y yo me tomé el trabajo de ponerla al día, prolija, todo divino para dársela y que estuviera orgullosa de mi… NUNCA LA DEVOLVIO, la pidió el primer mes de clase y hasta el día de hoy (unos 5 años después) nunca supe que fue de mi cuadernola, ni yo ni nadie porque no devolvió ninguna cuadernola, nunca.
Habrán servido para la estufa en invierno o para limpiar mierda del perro, no se.

3) Enseñaban como el traste, en todo el año no aprendimos nada, teníamos que dar un examen final en Diciembre para poder entrar a Secundaria (en el cual uno de la clase en 6to de escuela preguntó como se escribía “bomba” ¿?), Lucy y yo junto con otros tantos de la clase lo perdimos y tuvimos que estudiar todo el verano para poder salvarlo en Febrero, estudié con mi mamá en casa, un verano perdido, en el cuarahí hubiera sido distinto, lo salvé.

Ese año me sentía la mas fea, siempre me había sentido así pero ahora todavía mas, porque mi clase, que se supone somos un grupo y hay que apoyarse y todo ese montón de guarangadas, me trataron como basura, (a mi y a Lucy.F por mas que a ella no le guste admitirlo y se autoengañe diciéndose a si misma que no fue así, lo fue y ella lo sabe) y me hicieron sentir fea mediante apodos espantosos, estúpida y no digna de su “amistad” debido a su indiferencia, ni de respeto, pero hay algo que quiero decirles…
A LOS “AMIGOS” COMO USTEDES HAY QUE TIRARLOS AL FUEGO Y REIR MIENTRAS SE LOS QUEMA VIVOS.
Iba a poner una carita feliz junto a lo que escribí ahí arriba pero no estoy feliz, porque no me hicieron feliz, y porque ojala la vida les demuestre que se equivocaron con una persona que nunca les hizo nada y que tengan problemas que los hagan madurar y ser mejores como personas porque son una basura todos, del primero al último.

Y perdonen mi furia, pero la mantuve contenida muchos años, todos los del maldito Cidec púdranse.

Hubo una crisis económica en el Uruguay en el año 2002, Mis padres se vieron seriamente afectados por la misma, mi papá salió a vender anillos y cosas que tenía mi mamá para poder comer, pedían dinero prestado a amigos y familiares, una época realmente muy triste, mis viejos discutían mucho y muy seguido, se habían vuelto “malhumorados” peleaban, se enojaban por nada, en una ocasión mi hermana Mariana de en ese entonces 2 añitos, estaba llorando, mucho, se había atacado de tos y le costaba respirar, y lloraba, y lloraba, y lloraba, al rato la pudieron calmar con antibióticos y no recuerdo porqué eso desencadeno una fuerte pelea entre mis viejos, mi papá arrinconando a mi mamá contra una pared, gritándole, pasándole bruscamente las manos cerca de la cara (mi papá se vuelve muy agresivo cuando discute) de todas maneras sabía que el era incapaz de levantarle la mano a mi madre, en esa pelea él le pegó, mi mamá había estado casada de joven con un tipo que una vez le pegó, mi mamá agarró sus cosas y se fue, él no la volvió a ver, y ahora ¿Mi papá? Acto seguido mi viejo se fue a encerrar a un cuarto a llorar, mi madre se puso a sacar su ropa del ropero llorando y gritando, “¿Mamá que estas haciendo?” le preguntaba yo, “¡¿Acaso no ves lo que estoy haciendo?!” me gritaba ella y yo me moría.
No recuerdo cómo, estuvieron semanas sin casi hablarse, y en un momento dado me pidieron que saliera de casa para que ellos pudieran hablar, las cosas se terminaron solucionando, el se disculpó y nunca jamás se volvió a repetir, lógicamente tuvieron miles de discusiones muy subidas de tono en las que se decían desde “hijo de puta” a “yegua de mierda pones a nuestros hijos en mi contra”, cada una de esas discusiones a mi me mataba un poco mas, lloraba, tirada en la alfombra de mi cuarto, a los gritos y pedía que “CALLENCE!!” pero no, seguían.

En fin, todo eso se desencadenó con la crisis del 2002, y es lógico pensar que si teníamos que salir a vender nuestras cosas para comprar comida no podíamos tampoco seguir pagando el alquiler de esa casa, ni de cualquier otra casa.
Por suerte en medio de todo ese desorden, un “señor” amigo de mamá (no recuerdo su nombre) nos prestó una casa que él tenía en alquiler, con la condición de no sacarle el cartel de “Se Alquila” y el día que apareciera un interesado, deberíamos irnos…

1 comentario:

  1. Dios mío, no te daba tiempo a salir de un problema para tener otro... Te mando un abrazo a distancia, no te sientas mal.
    Espero que escribas pronto, que quiero saber más cosas de ti.
    Carpe diem!

    ResponderEliminar